viernes, 23 de enero de 2009

En lugar de ir a esquiar a Alpes, que la gente vaya a Sierra Nevada


Jo, pues me he quedado chafado . Ahora, tras las nuevas recomendaciones del Ministro Sr. Sebastián, me entra un gran complejo de culpa, ya que el día 1 de Febrero tenía prevista una semana de esquí en los Alpes y voy a tener que cancelarla para ir a Sierra Nevada, no vaya a ser que se me tilde de antipatriota o se me haga responsable de la pérdida de algún puesto de trabajo.


Después de sus iluminadas ideas del regalo de las bombillitas, o del plan Vive para los coches, o el plan renove del turismo, ahora nos sale con que en nuestros hábitos de consumo tenemos que introducir el "factor español". Y mas concretamente, en la parte que a mi mas me interesa, porque soy muy aficionado al esquí, dijo literalmente: En lugar de irse a esquiar a los Alpes, que la gente vaya a esquiar a Sierra Nevada.


Pero, vamos a ver, Sr. Sebastián, ¿no se está dando cuenta Vd. de que está introduciendo un mensaje de puro nacionalismo económico? ¿no se da cuenta Vd. de que esto es lo que se hacía en la época franquista? ¿no se da cuenta Vd. de que esta recomendación incumple una exigencia legal de la Unión Europea, cual es la de prohibición de la publicidad de productos que no contemplen el marco único comunitario?.


En otro orden de cosas, si por culpa de la desatrosa gestión económica del Gobierno al que Vd. pertenece, yo he reducido mis ingresos profesionales, ¿por qué me pide que vaya a esquiar a Sierra Nevada, si me resulta mas barata una semana de esquí en Alpes?.


Por favor Sr. Ministro, no nos venga con tanta "iluminada idea" y empiece a introducir una auténtica política económica, que es lo que los ciudadanos necesitamos.

jueves, 22 de enero de 2009

Vuelven a proliferar los ataques phishing a Bancos




En estos últimos días han vuelto a circular por la red los típicos correos que, enviados al azar, pretenden llegar a usuarios de Bancos para tratar de confundirlos. Unas veces con mensajes bastante alarmistas, y en otros casos con indicaciones bastante creíbles, los delincuentes cibernéticos pretenden provocar que el usuario pinche un enlace que los dirige a una web falsa, a través de la que podrán apropiarse de datos bancarios, números de tarjetas, claves u otras informaciones confidenciales del cliente.

He tenido la oportunidad de analizar uno de estos correos dirigido a usuarios del Banco de Santander, y otro a clientes del Banco Popular y he de decir que me he quedado muy sorprendido de la gran calidad que tenía la falsificación de sus páginas Web.

Por ello y aunque sé que la mayor parte de los ciudadanos conocen estos riesgos, para evitar que algún desprevenido pueda caer en esta trampa, voy a dar algunos consejos, indicaciones y recomendaciones que ayuden a evitar este riesgo.

En primer lugar conviene recordar que ningún Banco o entidad financiera solicita a sus clientes datos personales o de sus cuentas y tarjetas de crédito, por correo electrónico, mensaje a móvil o llamada telefónica. Por tanto, caso de recibir un correo de estas características lo que nunca se debe de hacer es acceder a ese enlace que trae insertado, ya que, aun cuando no dejemos en el dato alguno, desde este enlace pueden tratar de introducirnos cualquier gusano que contamine nuestro ordenador.


Refiriéndonos ya al enlace (página web falsa) al que los delincuentes pretenden dirigirnos, voy a dar algunas observaciones para que cada uno pueda distinguir una página falsa de la auténtica.
  • Las transacciones bancarias se realizan mediante un servidor seguro con protocolo SSL que se activa automáticamente. Este servidor establece la conexión de modo cifrado de tal manera que los datos intercambiados no pueden ser manipulados por terceros.
  • Este servidor seguro se identifica mediante una dirección URL que comienza por https:, en vez de la http: normal de la mayor parte de las páginas.
  • En el navegador aparecerá un botón con la imagen de un candado cerrado, en vez de abierto como aparecería en una navegación no segura. También puede aparecer la imagen de una llave entera, en vez de una llave rota como aparecería en un navegador no seguro.
  • Si pinchamos en ese candado nos aparecerá la identificación del sitio. Por ejemplo: Veri Sing identificó este sitio como BBVA.net, o portal caixa.es, etc. Nos informará que la conexiòn con el servidor está cifrada y además nos dirá la fecha de caducidad del certificado de seguridad y si el dominio del certificado está vigente.
  • Una vez que estamos dentro de la página del banco, para mayor seguridad nos informará sobre la fecha y la hora de nuestra última conexión al sistema, lo que nos permitirá tener aun mas certeza de que es la página auténtica.
  • Por último, para evitar que utilicemos nuestro teclado y con ello impedir que los intrusos averiguen las claves que hemos tecleado, las páginas auténticas suelen estar dotadas de un teclado virtual en la pantalla, de modo que, al usar este teclado, no pulsemos las teclas de nuestro ordenador.

Además de todo esto, cuando operamos y realizamos este tipo de transacciones bancarias o comerciales en internet, nunca debemos de olvidar la necesidad de tener incorporadas todas las actualizaciones de nuestro navegador así como los parches de seguridad. Igualmente es necesario tener vigente y actualizado un buen antivirus y activo el cortafuegos.

Y para terminar, aunque se da por sabido, recomiendo la necesidad de no revelar nunca las claves de seguridad, de no dejarlas anotadas en sitios fácilmente encontrables, y de elegirlas de un modo que no puedan ser facilmente identificables por su relación con datos nuestros conocidos (fechas de nacimiento, nombres, apellidos, teléfonos, etc.

miércoles, 21 de enero de 2009

Europa cierra las puertas a Africa


En el pasado mes de Junio escribí un post sobre la "Directiva de la verguenza", Directiva que pretende restringir los derechos de los inmigrantes, sin tener en cuenta las causas que provocan este fenómeno. Europa sencillamente, en vez de buscar la integración social de los inmigrantes, utiliza la represión y vulnera la dignidad de las personas.


Resulta absolutamente hipócrita la tenacidad con la que Europa trata de evitar la llegada de inmigrantes africanos sin consideración alguna a que estas personas son un residuo patético de las correrías coloniales de los civilizados estados europeos.


Es mas, ahora, acosados por la crisis económica mundial, los europeos queremos fabricar un castillo de altas murallas para blindarnos, vivir lo mejor posible y olvidarnos de aquellos a los que después de tantos años saqueando Africa, despojándolos de sus riquezas, de su cultura, de sus recursos, e infectándolos de fiebre consumista, ahora se mueren de hambre, de miseria, de guerras fratricidas y de deseperación.


Nos hemos olvidado pronto de que, en mucha medida, los europeos ahora somos ricos y disfrutamos de altos estándares de vida, gracias tanto a lo que nos hemos llevado de Africa, como al duro trabajo que ahora realizan para nosotros estos ciudadanos inmigrantes. Por el contrario estos pobres africanos se quedan padeciendo su miseria sin que nadie se acuerde de ellos.


¿Resulta tolerable que, quien durante dos siglos esquilmó recursos naturales y riquezas, e incluso mató y violó, venga ahora a dar lecciones sobre derechos humanos y moral europea? ¿Se acuerda alguien de las masacres que los ingleses realizaron en Kenia o Rodesia? ¿nos acordamos de lo que han hecho los franceses en Dakar y Costa de Marfil? ¿Y qué decir de las atrocidades promovidas por los belgas en el Congo o por los alemanes en Namibia? ¿y de las cacerías portuguesas en Angola y Mozambique? . Y nosotros españoles ¿qué hemos hecho en Guinea, Fernando Poo o Sahara?. ¿No fué la codicia por los diamantes la que regó de sangre Sierra Leona?.


Ahora mismo, en estos días, todos estamos preocupados por los mas de mil ciudadanos muertos en la Franja de Gaza. Todos los medios de comunicación se hacen eco de esta noticia. En cambio ¿hay leído ustedes alguna noticia de las muertes que en este momento se están produciendo en el Congo?. Pues señores, diariamente están muriendo mas de mil personas y en estos últimos años han muerto cinco millones de personas víctimas de la fratricida guerra. Pero claro, esto es poco importante para nosotros. Nos pilla muy de lejos.


Ahora, con la brutal crisis económica que tenemos, todo esto nos importa aun menos. Lo que verdaderamente nos importa es repeler con mas eficacia esas pateras llenas de desesperados, para detenerlos, encerrarlos durante un tiempo y deportarlos. Y de paso, promocionamos el turismo ,al evitar que estas pobres personas afeen nuestras glamurosas playas.


Si verdaderamente los europeos y por ende los españoles, fuéremos consecuentes con nuestras propias políticas de derechos humanos, con nuestros principios de solidaridad y de buena ciudadanía, tendríamos que acoger con los brazos abiertos a estos pobres africanos que llegan a nosotros, pedirles perdón y ayudarlos compartiendo con ellos algo de lo que a nosotros nos sobra.


Porque, no lo olvidemos, llegan a nosotros y nos piden migajas. Nos piden vender cuatro baratijas en la calle, nos piden hacer aquellos duros trabajos que el ciudadano europeo no quiere hacer, nos piden..... un poco de dignidad que parece ya no nos queda.


miércoles, 14 de enero de 2009

Nuestra democracia evoluciona hacia la politocracia


Como todo el mundo sabe, la democracia es una forma de organización del Estado en la que los ciudadanos gobiernan a través de representantes elegidos y a los que se les confiere legitimidad. Se trata de una forma de convivencia en la que, teóricamente, todos los ciudadanos somos libres e iguales ante la ley. Es el pueblo quien elige a esos representantes políticos y después, mediante mecanismos de participación directa o indirecta les da esa legitimidad. La legitimidad de los Gobiernos y de los Partidos por tanto, es dada por los ciudadanos, con el objetivo último de que velen por los intereses colectivos del pueblo.

Cuando en un momento determinado los gobernantes y los políticos empiezan a olvidarse del fin último para el que han sido elegidos, cual es la defensa de los intereses colectivos de los ciudadanos, y empiezan a gobernar pensando en sus propios intereses personales o en los de los partidos políticos a los que pertenecen, estaríamos hablando de "politocracia".


El pasado día 13 de Noviembre ya he escrito un post titulado "los políticos no tienen verguenza torera", en el que hablaba de las prácticas habituales de la clase política. Al igual que me ocurre a mi, pienso que en estos tiempos, a nadie medianamente informado, se le escapará que nuestras clases políticas ya se han instalado en la "politocracia".
Ahora, en una crisis económica tan brutal, a nuestros gobernantes poco les interesan los problemas de los ciudadanos. Poco les interesan los idearios políticos de sus partidos. Poco les interesan las promesas que hacían en sus campañas electorales.

Ahora, nada mas ser elegido, lo que le importa a un político es cuanto se va a subir el sueldo, cual va a ser el coche de lujo que va a tener, qué decoración va a tener en su despacho, qué viajes exóticos va a realizar. Lo que le importa al político, aunque pierda todas las elecciones a las que se haya presentado, es perpetuarse en la actividad política. Lo que le importa al político es estar bien colocado en el "sistema" para obtener toda clase de prebendas. Lo que le importa al político es estar situado para obtener una buena "colocación" cuando abandone la política. Y claro, para eso hay que hacer favores a ciertos empresarios al objeto de que se acuerden de ellos cuando abandonen la política.


La ideología política pierde protagonismo frente a la necesidad de perpetuarse en el "sistema" y para ello si es necesario, se desmembra el Estado, se da todo lo que piden a determinadas Autonomías, se pacta con partidos independentistas, o si es necesario se pacta con el mismo diablo. Y me refiero tanto a los políticos que hoy nos gobiernan como a los que están en la oposición, que en vez de hacer oposición, lo que hacen es crear todo tipo de guerras internas para detentar poder.


Ya no hay ideología. Ya no hay compromiso político: Y, claro, si esto ya no existe ¿qué es lo que nos queda? Pues nos queda ser gobernados por una nueva clase social "la politocracia", a la que poco interesamos los ciudadanos. Tampoco interesan esos políticos fieles a un principio o a una ideología, ya que pueden ser muy molestos, y por eso se les elimina. La politocracia se ha convertido en un poder al servicio de su propio interés personal.


Por eso, todos los ciudadanos de a pié debemos de revelarnos para tratar de conseguir que esa nueva "casta" se vaya debilitando y vaya evolucionando hacia ese fin último para el que han sido elegidos: La defensa del bien común del pueblo. Y la oportunidad la tenemos ya muy cerca, en las próximas elecciones autonómicas y al Parlamento Europeo. No nos dejemos engañar y castiguemos en las urnas a estos "politócratas".

viernes, 9 de enero de 2009

España entra en una profunda recesión


El Instituto de Economía Mundial acaba de dar unas previsiones verdaderamente desalentadoras y preocupantes para nuestra economía. Dice este Instituto que la economía española entrará en una profunda recesión en este ejercicio, ya que pese a las medidas tomadas por el Gobierno, el Producto Interior Bruto podrá caer hasta el 3,2%.


Sólo hay tres países que sufrirán una caída del PIB más acusada que la de España. Se trata concretamente de Estonia, con un 3,5%, Hungría con un 4% y Bélgica con un 3,4%.


Si a esto añadimos los desalentadores datos del paro que hemos conocido ayer y consideramos que, conforme a las previsiones de dicho Instituto, nuevamente España, juntamente con Eslovaquia, estará a la cabeza del desempleo en la Unión Europea, muy, pero que muy mal pintan las cosas.


Es lamentable que ante una situación económica tan grave, tengamos un Gobierno absolutamente incapaz de tomar medidas contundentes , e igualmente tengamos a un débil partido de la oposición incapaz también de hacer verdadera oposición y proponer medidas concretas.


miércoles, 7 de enero de 2009

El 84,6% de los correos electrónicos es "spam"


A este molesto y desagradable problema de los correos electrónicos masivos no deseados, llamado "spam", no le afecta la crisis económica y financiera. He visto en un informe elaborado por INTECO, que el 84,6% de los correos que recibimos, son "spam". Y además preocupa que este problema está afectando ya a los teléfonos móviles con recepción masiva de sms.


Sin duda alguna, el correo electrónico es uno de los pilares de la Sociedad de la Información, pero a la vez es un importante problema tanto para los particulares como para las empresas, ya que además de saturar los buzones de entrada, provoca grandes pérdidas de tiempo en su eliminación y muchas veces genera errores al eliminar correos buenos que confundimos con envíos no deseados. A su vez el e-mail es el vehículo de masivos ataques informáticos basados en técnicas de ingeniería social, cual es el caso del phishing.


No hay cifras fiables sobre la medición del impacto económico y social que causa este correo no deseado. No obstante, si tenemos en cuenta el citado informe de Inteco, el coste económico para las empresas, es de 179€ por empleado (valoración del tiempo invertido en eliminar los Spam). A esto hay que añadir las fuertes inversiones que hay que realizar para actualizar los sistemas informáticos, mejorar los filtros antispam, y avanzar en la seguridad de la información.


A nivel legislativo nuestro Ordenamiento Jurídico no tiene un tratamiento legal específico para los correos no deseados. Sólo hay una regulación del "spam comercial" en la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información en en aspecto sancionador, e igualmente hay una regulación en la Ley Orgánica de Protección de Datos.


Pero, pese a estas normativas, el gran problema que se plantea es que la gran masa de los correos no deseados, nos vienen de servidores situados en el extranjero (sólo un pequeño porcentaje nos llega desde servidores o empresas situadas en España) y esto hace que la acción protectora de nuestros Tribunales se esfume, al no poder perseguir este tipo de prácticas realizadas desde países extranjeros.


Por todo ello, mucho me temo que a corto plazo seguiremos sufriendo este desagradable problema.